"El legado de Pedro Otón, su visión y su coraje se respirarán en cada reunión y foro del síndrome de Down"

PALABRAS CLAVE: Down España, Presidente, Presidente de honor
Autor: Down España
Fecha de publicación: 03/12/2010
Clase de documento: Noticias
Formato: Texto

Referencia bibliográfica

> Editor: Down España
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RESUMEN:

Con estas palabras recuerda el presidente de DOWN ESPAÑA, José Fabián Cámara, a su antecesor en el cargo, Pedro Otón, que falleció el pasado 29 de octubre después de haber presidido la Federación durante los últimos 12 años

Noticia

"El legado de Pedro Otón, su visión y su coraje se respirarán en cada reunión y foro del síndrome de Down"

Transcribimos aquí la columna que José Fabián Cámara dedicó a Pedro Otón en el último número de la revista del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).

Recuerdo perfectamente el momento en el que le conocí. Corría el año 1998 y en el transcurso de una de nuestras asambleas se buscaban salidas a la situación crítica por la que pasaba la Federación. Pedro, desde la mesa que presidía el acto, se mostraba como un capitán de barco que manejaba, con mano firme, las velas en medio de aquella tempestad.

Con el pasar del tiempo, Pedro fue sacando al barco de aquella tormenta y, con la destreza de un capitán experimentado, llevó a DOWN ESPAÑA hacia nuevos puertos.

Recuerdo cuando en el año 2002 me llamó para formar parte de la candidatura que presentaba. Fue todo un orgullo que contara conmigo para esa andadura y así comenzó a crecer nuestra amistad y mi admiración hacia su persona.

Pedro era, sobre todo, un hombre bueno, un trabajador incansable y un excelente amigo. Poseía una capacidad de comunicación extraordinaria, una inteligencia fuera de lo normal y un talante abierto y respetuoso con los demás. Estas cualidades hacían de él un referente y una persona a la que todos respetábamos y admirábamos.

Pedro tenía una inmensa capacidad de trabajo. Las reuniones de Junta Directiva se prolongaban a lo largo del fin de semana a un ritmo maratoniano. Incluso en los últimos tiempos, cuando recibía durísimas sesiones de tratamiento médico y la enfermedad comenzaba a hacer mella en sus fuerzas, aguantaba las reuniones con una frescura y un ánimo sobrehumanos.

Pero no todo en Pedro era trabajo y responsabilidad, también sabía disfrutar de la vida, de esos momentos de convivencia con los amigos tras el trabajo. Era feliz cuando se rodeaba de los suyos, de su mujer y de sus hijos. Su mujer, María José, fue su compañera y cómplice hasta el último momento.

Pedro José, el mayor, le conectó para siempre con el mundo del síndrome de Down. Con él vivió cada logro y cada fracaso como si fueran propios, apoyándole en su camino a la independencia..., y su hija Virginia, con la que se deshacía en halagos y que recientemente le había dado dos nietos, Lucas y Leo, por los que sentía una verdadera pasión.

Pedro ejercía de orgulloso abuelo, cada vez que tenía ocasión nos enseñaba fotos de los pequeños y nos contaba, orgulloso, sus peripecias. Pedro se ha ido, pero siempre estará entre nosotros. Su legado, su visión y su coraje se respirarán en cada reunión y foro del síndrome de Down. Como dice mi querida Juana Zarzuela, Vicepresidenta 1ª de DOWN ESPAÑA, “no sabemos si el Cielo será inclusivo pero si no lo es, seguro que Pedro estará convenciendo a Dios para que lo sea”.

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