Campañas, Eventos y Relaciones con terceros -> III Congreso Iberoamericano - Monterrey
RESUMEN:
La ponencia del gerontólogo repasó una reciente investigación realizada en España con el objetivo de mejorar el conocimiento sobre el proceso de envejecimiento saludable de las personas con síndrome de Down
La ponencia del gerontólogo repasó una reciente investigación realizada en España con el objetivo de mejorar el conocimiento sobre el proceso de envejecimiento saludable de las personas con síndrome de Down.
Para Berzosa, vivir muchos años supone hacerlo en una sociedad de cambios acelerados e inesperados, algunos de los cuales afectarán directamente a las propias personas con síndrome de Down. Cambios que repercutirán en el modelo familiar tradicional.
Por ello, se deben planificar nuevos escenarios que sigan siendo favorables a la vida independiente conseguida y no conlleven la disminución de la inclusión social conquista. “El aumento de la esperanza de vida de las personas con síndrome de Down va ligada a una mayor autonomía”, agregó el gerontólogo.
En opinión del experto, las entidades deben desarrollar programas de intervención que respondan a las demandas que el envejecimiento conlleva en sus variables físicas, psíquicas y sociales.
Las expectativas ante el envejecimiento que tienen las personas con síndrome de Down coinciden con las que tiene la población en general:
× El deseo de envejecer en la propia casa y en el entorno en el que se ha vivido.
× La incertidumbre sobre aspectos tan cotidianos como “de qué voy a vivir” y “si podré estar con mi familia, con quién me relacionaré de las personas que conozco cuando sea muy mayor y quién me atenderá si mi salud no me permite desempeñar las actividades de mi vida diaria”.
× El convencimiento de que el envejecimiento es un proceso que requiere ir preparándose con años de antelación, desarrollando capacidades personales, actitudes relacionales y proyectos gratificantes que garanticen un envejecimiento activo y satisfactorio.